La vicealcaldesa y concejal de Fomento y Patrimonio, Rebeca Pérez, ha asegurado durante una visita técnica a la antigua Prisión Provincial de Murcia que «los trabajos de rehabilitación de la Cárcel Vieja se desarrollan en tiempo y forma conforme a lo previsto».
Este emblemático edificio es una pieza clave en la estrategia del Ayuntamiento de Murcia para recuperar su patrimonio histórico-cultural, en un año especial en el que la ciudad celebrará su 1200 aniversario en 2025. La restauración está enfocada en preservar su estructura y valor histórico, garantizando que el resultado final respete la fisionomía original del edificio.
Actuaciones desarrolladas y en proceso
Hasta la fecha, se han realizado labores de vallado, desescombrado, limpieza y apuntalamiento, así como el desmontaje y traslado de elementos arquitectónicos originales, como puertas, ventanas y cerrajería, que serán restaurados e incorporados nuevamente en la fase final de la obra.
Actualmente, los trabajos se centran en la demolición de tabiquerías y muros interiores, la eliminación de falsos techos y perfiles de sustentación. Estas labores están ya completadas en el ala de las antiguas cocinas y avanzan en el área de visitas de abogados y la planta superior. También se trabaja en la recuperación de las tejas de la cubierta del ala de cocina, con el fin de reforzar el forjado de esta zona.
Fase de micropilotaje
Paralelamente, se está preparando la fase de micropilotaje, que permitirá cimentar los pilares que sostendrán los muros laterales del corredor central, uniéndolo con los espacios destinados al comedor y las aulas. En esta fase se instalarán 42 micropilotes de 150 mm de diámetro y 18 metros de profundidad, con una duración estimada de mes y medio.
Las obras, iniciadas en diciembre con un presupuesto de 3,78 millones de euros y un plazo de ejecución de 14 meses, abarcan una superficie de 2.000 metros cuadrados. El objetivo principal es la restauración del pabellón principal, que albergaba a los internos, incluyendo su cimentación, estructura y envolvente.
Un espacio para la cultura
La rehabilitación de la Cárcel Vieja la transformará en un centro cultural de referencia, con zonas de uso público, incluyendo:
- Control de accesos, baños y vestíbulo.
- Dos salas polivalentes con capacidad para 150 personas cada una, destinadas a presentaciones, actuaciones, proyecciones y pequeños conciertos.
- Espacios expositivos de más de 200 metros cuadrados.
El diseño apuesta por un concepto abierto y versátil, con grandes espacios tipo «contenedor» y la creación de nuevos núcleos de escaleras, ascensor y aseos, garantizando accesibilidad y funcionalidad.
Integración en el entorno urbano
El proyecto contempla la eliminación del muro perimetral y la apertura de los antiguos patios carcelarios hacia la calle Torre de la Marquesa, generando nuevas zonas de recreo. Una vez conectados estos patios con la vía pública, se integrarán mediante un nuevo adoquinado y piedra recuperada de la demolición, así como alineaciones de arbolado y alumbrado público.
El proyecto está cofinanciado por la Unión Europea «NextGenerationEU», dentro del Programa de Impulso a la Rehabilitación de los Edificios Públicos para las Entidades Locales (PIREP local), con un aporte de 3 millones de euros.
Un edificio con historia
Construido a principios del siglo XX en estilo ecléctico-neomudéjar, el edificio destaca por sus fachadas de ladrillo visto y mampostería. Fue inaugurado en junio de 1929 y funcionó como prisión hasta 1981, cuando se abrió el nuevo centro penitenciario de Sangonera.
El recinto tiene una superficie de 7.910 m², incluyendo patios y jardines, con un total de 6.525 m² construidos distribuidos en dos plantas.
Un proyecto participativo
La rehabilitación de la Cárcel Vieja surgió de un concurso de anteproyectos, organizado por el Ayuntamiento de Murcia y el Colegio Oficial de Arquitectos, en el que participaron más de veinte equipos de arquitectos nacionales y europeos.
Los criterios de selección incluyeron:
- Solución arquitectónica y rehabilitación integral.
- Integración urbana y accesibilidad.
- Sostenibilidad económica y medioambiental.
- Tratamiento de jardines y espacios libres.
- Usos propuestos para el edificio.
- Rigor presupuestario.
El proyecto ganador, ‘Muros etéreos’, del arquitecto murciano Manuel Hernández, fue seleccionado por un jurado presidido por el alcalde de Murcia e integrado por representantes del Ayuntamiento, colegios profesionales y expertos en arquitectura y patrimonio.
Con esta transformación, la Cárcel Vieja de Murcia dejará atrás su pasado penitenciario para convertirse en un nuevo pulmón cultural de la ciudad.